Un espacio de datos se define como una infraestructura descentralizada para compartir e intercambiar datos de forma fiable en ecosistemas de datos basados en principios comúnmente acordados.
El Reglamento (UE) 2022/868 («Ley de Gobernanza de los Datos») establece el marco legislativo a nivel de la Unión Europea para facilitar el establecimiento de un mercado único a escala de la Unión. En él se concreta, entre otros, el gobierno para crear y mantener el marco de autorización (ver figura 12 del documento abajo).
En el documento “Design principles for data spaces”, se detallan los principios del diseño de los espacios de datos a crear en la Unión Europea. Así mismo, se describe una arquitectura de 3 niveles (ver figura 8 del documento abajo), los requisitos asociados a la misma y los bloques de construcción (building blocks) tanto técnicos como de gobierno en los que se sustenta.
Por último, recoge los retos y oportunidades de las distintas iniciativas sectoriales transversales de espacios de datos en los que se está trabajando en la Unión hoy en día y, las principales fases para la puesta en marcha y el despliegue previsto para los próximos años para hacer realidad el espacio de datos Europeo (alineado con el Espacio Internacional de datos).
Los principios de diseño de los espacios europeos, tal y como recoge el documento, son:
- Soberanía del dato. Es la capacidad de autodeterminación exclusiva sobre sus datos de una persona física o una entidad corporativa. Es decir, la capacidad de decidir en todo momento QUE datos, QUIEN los utiliza y PARA QUÉ.
- Datos en igualdad de condiciones. Es decir, los participantes en el espacio de datos compiten en función de la calidad del servicio y no de la cantidad de datos que controlan. Esta es una condición fundamental para crear una economía de intercambio de datos justa.
- Infraestructura soft descentralizada. La infraestructura informática no es monolítica y centralizada. Se trata de una “infraestructura soft” formada por acuerdos en todas las disciplinas: funcional, técnica, operativa, legal y económica que permiten que los espacios de datos sean interoperables entre sí. Además del principio de soberanía de datos emanan unos requisitos funcionales y no funcionales tales como interoperabilidad, portabilidad, capacidad de búsqueda, seguridad, privacidad y fiabilidad, que todas las iniciativas que se adscriban al espacio europeo de datos tienen que satisfacer.
- Gobierno público-privado. Para el diseño, la creación y el mantenimiento en igualdad de condiciones de los datos es esencial una buena gobernanza. Todas las partes interesadas deben sentirse representadas y comprometidas. Esto incluye a los usuarios (personas, empresas) o proveedores de servicios de datos, así como a sus socios tecnológicos y profesionales.
Recalcar la importancia de la financiación pública y el compromiso adquirido por los distintos niveles de la Administración Pública para hacer realidad la estrategia del Espacio de Datos Europeo.